Muchas personas piensan que no es fácil ser un emprendedor, y también hay quienes quieren creer que es una tarea que requiere sólo de ideas innovadoras y compromiso para llevarlas a cabo. Si realmente fuera una tarea sencilla, todos estaríamos haciéndonos ricos siendo emprendedores exitosos, pero la realidad nos dice que la mayoría de las veces es necesario atravesar por una serie de constantes retos que en conjunto forman “La ruta del emprendedor”.
Todo comienza cuando concibes una idea de negocio y te das cuenta de que no es nada sencillo aterrizarla. Se torna un poco complicado cuando analizas la situación y decides emprender, puesto que tu idea no la creen incluso tus mejores amigos, asesores o personas cercanas a ti.
En este punto te percatas de que no puedes solo (tal vez te hace falta capital, conocimientos, experiencia o bien contactos) y es complejo vender tu idea para encontrar y poder contar con socios de confianza. Una vez que los tienes, notas que no es nada fácil trazar una ruta para introducir tu producto o servicio al mercado, puesto que es todo un reto obtener tus primeros clientes, ya que no creen fácilmente en empresas nuevas (y especialmente empresas nuevas de personas jóvenes) con productos y/o servicios nuevos. Posteriormente los obtienes, y ahora el nuevo paso en la ruta es superar el hecho de que tus clientes no te pagan a tiempo, mientras a ti te esperan implacables las deudas pendientes. Finalmente, obtienes los pagos. Ahora el reto es mantenerte en el mercado y conservar diferenciación; porque existe alguien más (o muchos más) que ofrece un producto o servicio similar y algunas veces con prácticas de negocio poco éticas…
¿Una misión que parece imposible? Desafortunadamente hay muchas personas que lo ven de esta manera. Sin embargo, conociendo honestamente tus capacidades y limitantes, generando una visión clara y real del futuro que quieres, y con tenacidad, perseverancia, paciencia y siempre dispuesto al cambio, seguramente lo lograrás.
La ruta del emprendedor está llena de momentos desalentadores y algunos otros realmente agradables, que hacen que valga la pena todo el esfuerzo. Para ser un verdadero emprendedor se requieren distintas aptitudes, pero sobre todo Actitud; actitud para siempre encontrar la manera de seguir adelante y de mantenerse en constante crecimiento.
Para atravesar exitosamente la ruta del emprendedor, necesitas una actitud suficiente que te permita estar listo y superar las siguientes situaciones:
Que no crean en tu idea.
Que te digan que no vas a poder y que mejor te enfoques en lo que ya tienes o eres y que consigas un empleo.
Que no te salgan las cosas a la primera, ni a la segunda y algunas veces ni a la tercera.
Que no tengas estabilidad económica.
Quedarte sin dinero y tener deudas.
Que te cierren muchas puertas.
Cambiar estrategias y lidiar con conflictos día con día.
Alentar a tus seres queridos para continuar convenciéndolos de las metas que vas a lograr.
Perder oportunidades importantes por la falta de experiencia.
Dedicar gran cantidad de tu tiempo y esfuerzo en el proyecto.
¿Quieres un verdadero reto? ¡Conviértete en un emprendedor!
Algunas personas piensan que un emprendedor es alguien de gran capacidad económica, con sobresalientes estudios, experiencia en el negocio, redes de contactos establecidas, entre otros; sin embargo, la realidad nos muestra que el emprendedor es una persona que se conoce honestamente a sí misma y a su entorno, se complementa (trabaja en equipo), visualiza claramente su futuro y a pesar de todas las dificultades y riesgos presentes encuentra rutas para lograrlo, avanzando sin perder tiempo y enfocada siempre en los objetivos.
Un emprendedor mantiene un balance entre sus sueños de largo plazo y la realidad del corto. Un emprendedor es capaz de superar lo que la gran mayoría de las personas considera como “muy duro”, “desesperante”, “imposible”, entre otros. Un emprendedor no se queja, hace los ajustes necesarios y continúa. Un emprendedor es aquel “pobre tonto” que cree que sus sueños se pueden lograr, que busca, lucha y se mantiene hasta el final.
Desafortunadamente, muchas personas se han quedado y se quedarán en el camino, pero lograr las metas y disfrutar la recompensa, hace que bien valga la pena el atravesar por esto que he llamado: “La ruta del emprendedor”.
Ing. Paulo César Ramírez Silva
Director General de EmprendHEC
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Después de cientos de experiencias y un largo camino recorrido, en EmprendHEC descubrimos que, para alcanzar el éxito en cualquier proyecto que emprendas, es casi indispensable tener claro tu proyecto de vida primero.
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